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8 Reglas mnemotécnicas sencillas para ayudar a los niños a estudiar

Reglas mnemotécnicas adolescentes
La técnica de loci estimula la imaginación de los menores
Sapos y Princesas
Sapos y Princesas
Fecha de actualización: 06.02.21

Desde muy pequeños, los niños se enfrentan a sus primeros desafíos de aprendizaje cuando en el colegio deben memorizar conceptos, nombres, países, lugares y fechas. Como padres, podemos potenciar la agilidad mental y mejorar la retentiva de nuestros hijos para el estudio mediante el uso de algunas reglas mnemotécnicas.

Qué son las reglas mnemotécnicas

Son métodos que ayudan a recordar cualquier tipo de información, desde nombres, conceptos y fechas hasta secuencias de datos o listas. Estos trucos son utilizados generalmente por niños y jóvenes en el colegio, e incluso por adultos en la universidad.

Rosa María Jiménez, profesora de didáctica del inglés en la Universidad de La Rioja y experta en diseño de materiales didácticos, defiende en una investigación el empleo de este sistema para memorizar información.

“El uso de las técnicas mnemotécnicas no es sinónimo de frivolidad o ligereza en el aprendizaje. Por el contrario, suele ser un indicativo de cultura e inteligencia por parte de quien las utiliza, al saber aprovechar los recursos de los que disponemos para facilitar el aprendizaje”, afirma.

Trucos de mnemotecnia para los niños

Estas 8 reglas mnemotécnicas ayudarán a nuestros hijos en el colegio y les servirán para sus estudios durante toda la vida. A continuación, os las explicamos con detalle:

1. Acrónimos

El ejercicio consiste en recordar una frase o concepto usando una combinación de iniciales que sea conocida o suene bien en castellano.

Ejemplo:

Si tu hijo debe aprender la frase “Centro de Alto Rendimiento de España”, le será más fácil si junta las iniciales: CARE. De este modo, su mente intentará encontrar el significado de cada letra para obtener la frase correcta.

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Los acrónimos pueden ser un recurso divertido para retener conceptos | Fuente: Unsplash

2. Acrósticos

Son un método divertido para estimular la agilidad mental de los niños y una de las reglas mnemotécnicas con más tradición. Se trata de crear frases llamativas usando las iniciales de una palabra conocida.

Las iniciales se leen en vertical y son el punto de partida de cada frase.

Ejemplo:

  • Bienvenido a nuestra casa
  • Esperándote estuvimos
  • Noches, días y semanas
  • Juntos hoy te recibimos
  • Aplaudiendo de tus ojos
  • Milagros de alegría
  • Impulsaste nuestro rostro
  • Nacimiento de sonrisas

3. Palabras clave

Es un truco muy útil para aprender vocabulario en otro idioma. Debes vincular la palabra que deseas memorizar a otra en castellano que tenga una similitud fonética, aunque sus significados no posean relación.

Para ello, deberás imaginar una frase que asocie la palabra conocida con la que quieres retener.

Ejemplo:

Supongamos que tienes que memorizar ‘pillow’, que en inglés significa almohada. Entonces, piensa en la primera palabra en español que venga a tu mente, como ‘pillo’. A continuación, forma una frase con ella que te ayude a recordar. Podría ser algo similar a esto:

El pillo se acuesta en su almohada.

4. Técnica de loci

Entre las reglas mnemotécnicas está la técnica de loci, también llamada Palacio de la memoria o de los recuerdos. Es un ejercicio ideal para aprender un listado de países, ciudades, objetos, alimentos, etc. El niño deberá imaginar un recorrido conformado por distintas etapas, usando las conocidas frases “En primer lugar…”, “En segundo lugar…”, “En tercer lugar…”, y así.

El método de un paseo imaginario con distintas fases le permite vincular un concepto con otro y, además, situarlos en el orden correcto. De este modo, se facilita bastante el proceso de memorización de toda la lista.

Ejemplo:

Si tu hijo necesita acordarse de los 9 planetas que componen el sistema solar, el cuento podría quedar así:

“En primer lugar, salí a la tienda a comprar mercurio. En segundo lugar, en el parque vi una estatua de la diosa Venus. En tercer lugar, estuve jugando un poco con la tierra. En cuarto lugar, apareció un marciano (Marte) en su platillo volante…”

Las palabras clave de la historia no deben ser idénticas a aquellas que se tienen que memorizar, basta con que tengan cierta similitud.

Los investigadores Alfredo Campos y Leticia Ameijide, profesores del departamento de Psicología Básica en la Universidad de Santiago de Compostela, aseguran en un estudio que “la mnemotecnia no solamente influye en el aprendizaje sino también en la metamemoria, entendida como el conocimiento y el control que el individuo tiene sobre el funcionamiento de su memoria, incluyendo sus diferentes fases: codificación, almacenamiento y recuperación”.

Reglas mnemotécnicas psicología
Reglas mnemotécnicas | Fuente: Unsplash

5. Método del relato

Es una de las reglas mnemotécnicas que ayuda a niños y jóvenes a aprender un listado de palabras. Para ello, se usan otros vocablos que tengan algún tipo de relación. Después, el estudiante debe crear con ellos un relato que posea lógica y sea fácil de recordar.

Ejemplo:

Si debe memorizar los países que componen la Unión Europea, primero necesitará establecer las palabras que asociará con las distintas naciones:

  • Bélgica: bellota
  • Croacia: croissant
  • Dinamarca: dinamita
  • Grecia: gracia
  • Letonia: lento

Y así con el resto.

Finalmente, formar un relato, que podría quedar así:

“Salí a caminar por el parque y me encontré algunas bellotas en el césped. Me senté y comí un croissant de chocolate. Después escuché una explosión con dinamita que, aunque me asustó al principio, me causó un poco de gracia. Por eso comencé a caminar más lento…”

6. Canciones

Las canciones son métodos lúdicos muy efectivos para el aprendizaje infantil. Solo necesitas crear una canción con rima relacionada con el tema de estudio, que puede ser historia, salud, arte e incluso matemáticas.

Ejemplo:

En caso de que deseen retener los nombres de las comunidades autónomas, podrían crear una canción de este tipo:

“Salí a caminar con mi amiga Lucía, en las bonitas calles de Andalucía. De pronto nos topamos con un dragón, y tuvimos que escapar hacia Aragón. Como no queríamos sufrir más penurias, decidimos tomar un tren para Asturias…”

La Academia de Pediatras Americanos publicó un informe titulado El poder del juego: su función pediátrica para mejorar el desarrollo de los niños pequeños. En él se explica cómo las actividades lúdicas influyen positivamente en el desarrollo del cerebro de los menores, ayudándolos a mejorar sus capacidades de planificación y organización, y el manejo de las emociones.

“Además, el juego ayuda con el lenguaje, las destrezas matemáticas y sociales, e incluso ayuda a los niños a sobrellevar el estrés”, aseguran los pediatras de Estados Unidos.

7. Método fonético

Es un sistema que sirve para memorizar números, que será de gran ayuda para aprender fechas en la clase de historia. Se utiliza particularmente en aquellos menores a los que les resulta más fácil retener información con letras que con números.

La tabla para relacionar los números y las letras es la siguiente:

  • 0: r (al ser una consonante de la palabra ‘cero’)
  • 1: t d (ambas tienen un palito vertical)
  • 2: n ñ (tienen dos palitos)
  • 3: m (tres palitos)
  • 4: q (suena como comienza la palabra ‘cuatro’)
  • 5: l (50 en números romanos es L)
  • 6: s z (similitud fonética)
  • 7: f (de apariencia similar)
  • 8: g (también son signos parecidos)
  • 9: p (otros dos signos similares)

Ejemplo:

Si deben aprender el año de nacimiento de Hernán Cortés (1485), entonces tendrían que recordar esta serie de letras: TQGL.

Reglas mnemotécnicas
Los padres podemos ayudar a nuestros hijos con las reglas mnemotécnicas | Fuente: Canva

8. Memorizar fechas

Otro truco para no olvidar las fechas consiste en relacionar cada número con una escena imaginaria.

Ejemplo:

Supongamos que tu hijo necesita retener la fecha del descubrimiento de América: 12 de octubre de 1492 (12/10/1492). Lo podría hacer de la siguiente forma: 12 hermanos salieron a las 10 de la mañana, con 14 pelotas al parque 92. En definitiva, se trata de emplear la fantasía.


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