8 Juegos y métodos caseros para predecir el sexo del bebé

Una de las principales preguntas que se hacen los futuros padres es cuál será el sexo del bebé. A partir de la semana 20 de gestación ya se puede ver en las ecografías, aunque en muchos casos la experiencia de los ecógrafos y ginecólogos hace que esta fecha se adelante al intuir el pene y los testículos en los niños y la ausencia de ellos en el caso de las niñas.

Otros métodos científicos para saber qué sexo tendrá son a través de la amniocentesis, un estudio por la que se extrae líquido amniótico del interior de la madre para detectar anomalías congénitas o problemas genéticos, o los análisis de sangre, a partir de la octava semana de gestación.

Pero no son los únicos sistemas. Hay muchos más, sin ningún rigor científico, que se han empleado durante años por las abuelas. Juegos para predecir el sexo del bebé basándonos en la forma de tripa, lo que indica un anillo o cómo son tus sueños. Ideas populares que puedes probar y contrastar si acertaron o no.

1. Sueños a la inversa

Es normal que las embarazadas sueñen con sus bebés. En este caso, lo que cuentan los dichos populares es que los sueños se tienen que interpretar a la inversa. Es decir, si sueñas con una niña nacerá un varón y, si lo haces con un niño, alumbrarás una hembra.

2. El poder al agua

Dicen que, con un vaso de agua, puede saberse el sexo de bebé que nacerá. Para hacer esta prueba casera hay que llenar medio vaso de agua. También necesitarás una aguja e hilo. Enhebra la aguja y sujeta el extremo del hilo sin que la punta llegue a rozar el agua. Si la aguja toca los extremos del vaso, dicen que tendrás un niño. Si no se mueve o se balancea poco tendrás una niña.

3. Calendario chino

Hay muchas leyendas en torno a esta tabla. Una de las más populares cuenta que se creó durante la dinastía Qing y se basa en el Libro de los Cambios. El calendario centra en predecir el sexo uniendo las fechas lunares del nacimiento de la madre y la concepción del bebé. Como no es fácil conocer este dato, al menos para la mayoría, puedes realzar a conversión pinchando aquí y añadiendo la fecha del nacimiento de la embarazada y de la concepción. 

4. La prueba del anillo

Seguro que si estás embarazada te han hecho estos juegos para predecir el sexo del bebé. Aunque sea más un entretenimiento que una posibilidad de comprobar qué traes en la tripa, hacerlo es divertido. Solo necesitas coger uno de los tus anillos, mejor si es uno que usas siempre o con frecuencia, y colgarlo alrededor de un hilo. Siéntate o túmbate y deja que otra persona lo repose tres veces sobre tu vientre. Si al final va de un lado a otro, se dice que será niño. Si hace círculos tendrás una niña.

5. ¿Cómo es tu barriga?

La forma de tu tripa también es un método utilizado por las abuelas para predecir si el bebé será niño o niña. Para tener una fémina tendrás que tener una barriga redonda. Si es puntiaguda el bebé será varón.

6. Juegos para predecir el sexo del bebé con utensilios de cocina

Estas dos pruebas con muy similares y depende de la zona se suele realizar una u otra. Ambas consisten en esconder objetos debajo de unos cojines colocados en unas sillas y hacer que la futura mamá elija sentarse en uno u otro. Antes tienes que haber escondido unas tijeras abiertas y otras cerradas bajo los cojines. Si la embarazada se coloca sobre las que están abiertas tendrá una niña.

También puedes hacerlo con una cuchara y un tenedor. En caso de que escoja el tenedor tendrá un niño. Será una hembra si se sienta sobre la cuchara.

7. Ojo a los antojos

Los antojos de las embarazadas también han sido objeto de estudio para tratar de saber lo que les deparará el parto. Según apetezca un tipo de alimentos u otro, así será el sexo del feto. Las historias populares dicen que las niñas vienen cuando las madres tienen antojos de cosas dulces. En cambio, los niños nacerán si la embarazada quiere alimentos salados, agrios o amargos.

8. El poder de la sal

Para hacer estos juegos para predecir el sexo del bebé necesitas que la embarazada esté dormida y que no sepa lo que va a ocurrir, ya que de su respuesta depende el resultado. Una vez que la mujer esté preparada, con cuidado para que no se dé cuenta, echa un poco de sal sobre su cabeza y deja que siga soñando. Al despertar hay que pedirle que diga un nombre. Si es de hombre tendrá un varón y, al contrario, si menciona uno de mujer.