Para satisfacer las necesidades nutricionales de nuestros hijos, existen alimentos que deben estar presentes en su dieta de manera cotidiana. Además de las frutas, las verduras y los lácteos, los cereales presentes en algunas galletas infantiles de calidad les aportan la energía que necesitan desde el inicio de cada jornada. Un buen ejemplo dentro de dicha categoría es el que representan las Hookies de Gullón, producidas con ingredientes de calidad y concebidas para todo tipo de niños. Desde vegetarianos o veganos hasta celíacos, pasando por otros con intolerancias o alergias a determinados ingredientes.
Un aporte de energía capaz de mejorar el rendimiento académico
Tal y como recomiendan las principales asociaciones pediátricas, es saludable consumir, durante la infancia, en torno a cuatro unidades de este tipo de elaboraciones tanto en los desayunos como en las meriendas. El equivalente a esa cantidad serían unas 200 kcal, que se aconseja acompañar, en ambos casos, con un vaso de leche y una pieza de fruta pequeña.
La explicación a dichas indicaciones reside en el aporte energético que proporcionan las galletas infantiles al principio del día y a media tarde. Algo que las convierte en un alimento aconsejable durante todas las fases del desarrollo, desde el primer año de Educación Infantil hasta la adolescencia. En las diferentes etapas de la trayectoria escolar de nuestros hijos, incluirlas en su dieta, en las cantidades adecuadas, les mantiene más activos a lo largo de las horas lectivas y de las posteriores de estudio, un factor capaz de mejorar su rendimiento académico.
