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Lactancia materna y caries: Una relación sin evidencia científica

Lactancia materna y caries
Sapos y Princesas
Sapos y Princesas
Fecha de actualización: 29.07.15

A pesar de los prejuicios culturales de nuestra sociedad, la lactancia materna prolongada sigue teniendo beneficios tanto para la madre como para el niño y muchas mujeres eligen esta opción natural que, por otro lado, era la norma biológica hasta el siglo pasado. Instituciones como la OMS (Oganización Mundial de la Salud), la Unión Europea (UE) y la Asociación Española de Pediatría (AEP) recomiendan la lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses de vida, y complementada con otros alimentos hasta los 24 meses más, esto es, hasta que la madre y el bebé lo deseen.

Algunos autores han relacionado el desarrollo de caries con la lactancia prolongada y a muchas madres se les recomienda equivocadamente destetar precozmente a sus hijos alegando este motivo. La caries de la primera infancia (CPI) es una enfermedad crónica e infecciosa de etiología compleja y multifactorial. Consiste en un proceso destructivo del diente que tiene lugar como consecuencia de la desmineralización de la superficie dental. Las bacterias de la boca metabolizan la glucosa depositada sobre el mismo produciendo ácido láctico, lo que provoca que disminuya el pH y en consecuencia se produce la desmineralización. Por lo tanto, para el desarrollo de la caries son necesarias varias condicionesEn primer lugar hay que tener en cuenta que solo pueden darse cuando al niño le ha salido algún diente (no se produce cuando todavía no han erupcionado).

Lactancia materna y caries

¿Cómo se desarrolla la caries? ¿Cuáles son los factores que provocan su aparición?

  • Que haya bacterias cariogénicas: La boca se puede colonizar por estas a través de la inoculación involuntaria por parte de los padres y cuidadores, cuando se dan besos en la boca del niño, se sopla o se prueba la comida antes de dársela al bebé. Está demostrado que es un factor de alto riesgo para la aparición de caries en menores de 3 años si la madre ha tenido o tiene caries activas en el último año.
  • Que se consuman productos ricos en carbohidratos. Los alimentos con más de un 14% de azúcar son un alto riesgo. Muchos alimentos introducidos en la dieta precozmente como por ejemplo los cereales, contienen una elevada proporción de azúcares refinados de los que no somos conscientes.
  • El consumo de alimentos pegajosos y la ausencia de una adecuada higiene dental aumentan el riesgo. El tiempo durante el cual las bacterias están adheridas al diente es fundamental.
  • Que existan factores individuales de predisposición a caries: la cantidad de saliva, defectos del esmalte, una anatomía irregular de la superficie dental y otras circunstancias individuales pueden predisponer al niño a tener más caries.

La importancia de proteger y promover la lactancia

Los estudios que concluyen que la lactancia materna prolongada aumenta el riesgo de caries de la primera infancia (CPI) a menudo cuentan con grandes deficiencias metodológicas y no tienen en cuenta los factores relacionados con la patogenia de ésta enfermedad. Por otro lado, muchas veces, el posicionamiento de los profesionales respecto al tema está influenciado por opiniones personales, experiencias o prejuicios frente a la lactancia prolongada.

No existe evidencia científica sobre la relación entre lactancia materna y caries y, sin embargo, esta primera tiene demostrados beneficios sobre la salud, incluida bucodental. Por ello, todos los profesionales sanitarios, incluidos los odontólogos, tienen la responsabilidad de proteger y promover la lactancia materna apoyando las recomendaciones de la OMS y deben ofrecer mensajes correctos y actualizados, basados en la evidencia científica.

Afirmar que la lactancia materna prolongada produce caries sin una base científica concluyente, desprestigia los beneficios de la misma y culpabiliza a las madres que eligen seguir amamantando más allá de los 2 años, mal asesoradas por los propios profesionales o presionadas por una razón que carece de justificación, dejando así de disfrutar de todos los aspectos positivos que tiene la lactancia prolongada.

Fuente: Asociación Española de Pediatría (AEP)