La Senda fluvial de Nansa, que recorre unos siete kilómetros, es una de las rutas más conocidas de Cantabria. Se trata de un paso antiguo que fue creado por pescadores de trucha y salmón y que transcurría entre las poblaciones de Muñorrodero y Cades.

Senda fluvial de Nansa

Al recorrer la senda fluvial de Nansa disfrutarás de preciosos paisajes naturales. La ruta es de baja dificultad, por lo que es perfecta para el turismo familiar. En el camino, donde sin duda el gran protagonista es el río Nansa, encontrarás escaleras de piedra talladas, pasarelas hechas de maderas, cuerdas ancladas en rocas y pasos estrechos. Además, te encontrarás en medio de un entorno de hayedos, bosques y praderas, en las que también verás vacas y caballos.

Esta senda se conoce como la antigua ruta de los pescadores, ya que transcurre por los viejos caminos que formó el andar de los pescadores que buscaban truchas y salmones. Originalmente, unía la localidad de Muñorrodero con la central hidroeléctrica de Trascudia, en Camijanes. El trazado hasta Cades se creó posteriormente. Actualmente, la misma ruta se encuentra perfectamente señalizada y acondicionada para el uso turístico.

Senda fluvial del Nansa en Cantabria
Senda fluvial del Nansa | Fuente: Facebook de Cantabria Infinita

Así, podrás iniciar la ruta en cualquiera de estas localidades. Además, podrás hacer un recorrido completo o dividir el camino en dos. El primero termina en la rehabilitada ferrería de Cades. Y el segundo, que es el más corto, finaliza en la Central Hidroeléctrica de Trascudia. Durante el camino descubrirás los puentes por los que cruzaban los pescadores de una orilla a otra. Además, la ruta está llena de rincones preciosos, como la cueva El Rejo, en la que habitan diferentes especies de murciélagos.

Alrededores

Muy cerca de la senda fluvial del Nansa podrás disfrutar de más sitios naturales de gran belleza. Por ejemplo, si quieres pasar del agua de río al agua de mar te puedes acercar a la playa de Pechón, que está a solo diez minutos en coche. Esta es una playa de la costa occidental de Cantabria y casi colinda con el Principado de Asturias. Allí podrás disfrutar del paisaje paradisíaco que conforma las aguas turquesas del Cantábrico y los bosques de la costa.

San Vicente de la Barquera, en Cantabria
San Vicente de la Barquera | Fuente: Facebook de Cantabria Infinita

También puedes ir al Parque Natural de Oyambre que es uno de los espacios protegidos más importantes de la comarca de Sanja-Nansa. Allí podrás recorrer las rías de La Rabia, diversas marismas y disfrutar de las playas salvajes de Oyambre y Merón. Todo esto, bajo las vistas de los Picos de Europa que amenizarán todo el tiempo tu paisaje.

Si prefieres conocer un pueblo encantador, solo tendrás que dirigirte a San Vicente de la Barquera que, sin duda, es una de las villas más bonitas de la comunidad. El pueblo forma parte del Camino de Santiago y su zona antigua está declarada Conjunto Histórico Artístico. También destacan los puentes, siendo el más conocido el puente de Maza, ya que tiene veintiocho ojos.