Prepárate para vivir un viaje repleto de vivencias junto a tus hijos en un entorno que solo pueden ofrecer las Islas Canarias. Aunque en foto puedan incluso parecer paisajes creados a partir de una inteligencia artificial, sin duda son 100 % reales. La riqueza de sus espacios naturales, la autenticidad de sus tradiciones y la espectacularidad de sus playas hacen que, sin duda, sean un destino único. Descubre las 6 experiencias que te mostramos aquí, pues estamos seguros de que convertirán tu viaje a Canarias con niños en unas vacaciones realmente excepcionales.
1. Infinitas playas de todos los colores
Un elemento imprescindible de unas buenas vacaciones en familia son los días de baño y juegos en la playa. Las Islas Canarias, con sus 1.500 kilómetros de costa, son el lugar perfecto para ello. ¿Te imaginas ir a una playa con dos orillas? Pues apunta este nombre: playa de Sotavento. Sus 9 kilómetros de arena fina y aguas turquesas hacen que sea una de las más asombrosas. ¡Todo un paraíso! Pero hay muchas otras superaccesibles e ideales para pasar un día con los niños, como El Cotillo y las de Corralejo, en Fuerteventura; la playa de Papagayo, en Lanzarote, o la del Inglés, en Gran Canaria. ¡Un auténtico gustazo!
2. Una isla donde hablan silbando
Sí, has leído bien, porque un silbido puede tener mucho significado en las Islas Canarias. Este sonido que suele usarse para llamar la atención de alguien se convierte en La Gomera en un lenguaje único en el mundo. Es el silbo gomero, una excepcionalidad declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad que, todavía hoy, conservan sus habitantes. Lo emplean para comunicarse a través de barrancos y valles, y pueden recorrer distancias de 3.000 o 4.000 metros.
