Lleva la naturaleza a tu casa con una mesa de estación para los más pequeños: ahora toca la primavera

Para la educación Montessori la naturaleza juega un papel fundamental. La pedagoga proponía crear el hábito de que los niños se acerquen al entorno natural para experimentar a través de los sentidos. Pero mantener un contacto directo con la naturaleza de forma continuada es difícil, en especial en las ciudades, por eso te proponemos que lleves un trocito de ella a tu casa con estas ideas para hacer mesas de estación de primavera.

En la pedagogía Waldorf también se proponen acercar la naturaleza al interior, recreando las estaciones en mesas y haciendo que sean los niños los que preparen su espacio de forma autónoma y aprendan a medida que las forman. El objetivo es acercar, en este caso, la primavera a través de objetos del medio natural o simulaciones que nos ayuden a reconocerla y celebrar la llegada de la floración y del buen tiempo.

Antes de empezar, necesitas acondicionar un rincón de la casa o del aula para que los niños puedan decorar, interactuar y manipular los elementos que hay sobre ella. Aquí te dejamos tres ideas para que puedas inspirarte y crear tu propio espacio. 

1. Mesa de estación de primavera Waldorf

Con esta propuesta puedes ir haciendo variaciones sobre la estación a medida que pasan los meses y la primavera avanza. Modifica las flores, los animales y los recordatorios de las fechas que se celebran en cada uno de los periodos.

Para crear esta mesa, lo primero que necesitas es poner telas sedosas y agradables al tacto de los niños que simbolicen los colores propios de esta época del año. Juega con verdes, amarillos, anaranjados y azules intensos con los que recrear la hierba, las flores y el agua.

Una vez que tengas la decoración preparada, utiliza un arco iris de madera para completar los elementos básicos. Añade un cesto de fibras naturales lleno de virutas de madera para que parezca un acogedor nido de pájaros donde, además, podrías poner alguno de los huevos de Pascua que han adornado tu casa los días de fiesta. Serán la representación perfecta del nuevo ciclo que se inicia con la primavera.

Coloca también algunas jarritas con agua y flores. Puedes elegir entre frescas o de las artísticas hechas por los niños. Tenemos algunas ideas muy fáciles para hacerlas con papel y cartón que te servirán de inspiración. 

No olvides añadir algunos elementos recogidos del entorno, como palitos, alguna piedra, ramitas de lavanda o romero que, además, aportarán un agradable olor a la estancia. Y, si quieres, pon también un pequeño estanque con algunos patos de plástico y cristales blancos flotando.

Deja que los niños busquen en su biblioteca algunos libros relacionados con el campo para que completen la decoración de la mesa. Otro elemento que viene bien utilizar son las láminas ilustradas con flores o los dibujos que hayan hecho los niños con motivos primaverales.

2. Mesa zoológica

Otra opción para hacer tu mesa de primavera con la metodología Waldorf es crear un muestrario de los pequeños animales que resurgen en esta época. Será un buen momento para recodar a los niños el papel de fundamental de las abejas en la naturaleza y su trabajo como polinizadores. No olvides, tampoco, las mariquitas y las mariposas, dos de los insectos favoritos de los niños. Y estaría bien que hubiese una representación de saltamontes, ciempiés, orugas, hormigas, grillos, caracoles y algún sapo o rana. Incluso de pájaros, tan presentes en esta estación.

Además de algunos dibujos impresos o láminas para colorear, puedes añadir flores y hierba para recrear el entorno natural donde aparecen estos insectos y anfibios.

Para que conozcan más detalles de cada uno de los pequeños animales que has añadido, estaría bien colocar unas tarjetas que hayáis hecho juntos donde se expliquen las características de cada uno de ellos.

3. Mesa de estación Montessori

Cambia las cestas sensoriales de estaciones por una mesa donde los niños tengan todo a mano y los elementos sean fáciles de manipular, una experiencia sensorial al alcance de los más pequeños. Con esta propuesta el niño estará en contacto con elementos naturales, aprenderá su cuidado y la importancia que tiene el respeto al entorno.

Para comenzar, recoge de la naturaleza algunos elementos como piñas, plumas, piedras, briznas de hierba, flores, agujas de pino o dientes de león. Tan importante es el montaje de la mesa como la recolección de los elementos e ir viendo cómo el niño los descubre en su entorno e interactúa con ellos a través de sus sentidos.

Acompaña lo recogido con algunos libros sencillos en los que se hable de la primavera y del papel de las plantas y los insectos. También podéis utilizar arcilla o plastilina para hacer impresiones de los materiales recogidos y que los niños los manipulen y vean el resultado de su creación.

Beneficios de las mesas de estación

• Con las mesas estacionales, la metodología Waldorf traslada un trocito de naturaleza al interior de tu casa para que los niños puedan experimentar de forma continuada y no pierdan su contacto con el entorno.
• También fomentan el conocimiento del medio. En cada zona geográfica los procesos tienen momentos diferentes, lo que hará que los niños se familiaricen con los hemisferios y tomen mayor conciencia de los cambios que se producen a su alrededor.
• Mejoran el pensamiento lógico. A través de la mesa de estación de primavera aprenderán cómo varía la naturaleza en función del clima y su repercusión en los reinos vegetal y animal.
• Es un método de aprendizaje fácil y divertido, ya que interiorizan los conceptos del paso del tiempo de un modo directo y ameno en que ellos son los protagonistas.