7 Ideas ingeniosas y creativas para niños a los que no les gustan las manualidades

Son muchos los beneficios que tienen las manualidades para las niñas y los niños pequeños. A través de estas sencillas actividades fomentamos la creatividad y la concentración, desarrollamos la paciencia, la destreza y la coordinación y, además, reforzamos la autoestima. Pero no nos engañemos: no a todos les gustan. La clave con aquellos a quienes no les entusiasman mucho consiste en buscar manualidades creativas. Es decir, actividades que sean pequeños experimentos o juegos, o bien que tengan una temática que les resulte atractiva. Aquí os presentamos estos interesantes y divertidos proyectos —llamémoslos así— para despertar sus ganas de trabajar con las manos.

1. Figuras articuladas (¡actividad para reciclar!)

Podemos crear distintos personajes para decorar la habitación, expresar nuestros sentimientos o aprovechar su movilidad para hacer un cómic o una película en stop motion. ¡El límite es nuestra imaginación!

Materiales

• Restos de hilos, lanas, cartulinas, cartones, telas, fieltros, ojos saltones u otros recursos
• Pegamento
• Tijeras
• Taladro
• Encuadernadores redondos para conectar las extremidades con el tronco

Pasos

1. Corta un cuadrado de cartulina o cartón para la cabeza. Decórala. Para el pelo se pueden utilizar restos de lana o hilo.
2. A continuación, corta un cuadrado de cartulina o cartón más grande que hará de tronco. ‘Viste’ a tu figura usando restos de papel de colores, cartulina, telas u otro material.
3. Haz agujeros en los puntos donde las extremidades se unen al tronco.
4. Emplea los encuadernadores para unirlos.

2. Atrapasoles (¡actividad para reciclar!)

Aprovechando las tapas transparentes de algunos recipientes de comida, hemos hecho unos colgadores para las ventanas. Cuando son iluminados por el sol, colorean la luz como si fueran cristales de colores. En este ejemplo, hemos elegido una figura geométrica (un círculo) pero se puede hacer un atrapasol de cualquier otro dibujo o forma.

Se trata de una actividad muy relajante con un resultado original y decorativo. Los más pequeños la disfrutarán porque al colorear no se pueden salir de la raya, ya que, gracias a la pintura para cristales, los bordes están en relieve.

Materiales

• Impresora
• Dibujo en papel
• Tapa de plástico transparente de comida para llevar
• Pintura para cristales de color negro (si no se tiene, se puede mezclar pegamento líquido con pintura negra, en proporción 1:1)
• Rotuladores permanentes de colores
• Tijeras
• Alfiler
• Hilo

Pasos

1. Imprime una imagen o forma.
2. Coloca la tapa de plástico transparente de comida para llevar sobre el dibujo y repásalo con la pintura para cristales. Deja secar.
3. Una vez la pintura esté seca, recorta y colorea las distintas áreas con rotuladores permanentes.
4. Se puede hacer un pequeño agujero con un alfiler. Con un hilo, colgar junto a la ventana.

3. Llavero o colgante

Las posibilidades de este ‘plástico mágico’ son infinitas. Se trata de un plástico en folio que se puede imprimir y colorear y que, al meter al horno, se encoge. En este proyecto vamos a utilizarlo para hacer un sencillo llavero o un colgante.

Materiales

• Impresora
• Folios de plástico encogible e imprimible
• Lápices de colores
• Tijeras
• Taladro
• Una anilla para colocar las llaves (llavero) o un cordón (colgante)
• Opcional: epoxi 2 componentes o resina
• Opcional: purpurina

Pasos

1. Busca una imagen en blanco y negro e imprímela sobre el folio de plástico encogible (por la parte rugosa). Atención, a la hora de elegir la imagen, hay que tener en cuenta que el producto final va a encoger considerablemente, por lo que se deberá imprimir en un tamaño más grande del deseado.
2. Recorta la imagen y haz un agujero con un taladro en la parte superior.
3. Colorea con lápices.
4. Introduce la figura en el horno (precalentado a 160°) siguiendo las indicaciones del producto.
5. El plástico empezará a doblarse y encogerse. Deja la figura en el horno uno o dos minutos, hasta que vuelva a un estado prácticamente plano y deje ya de encogerse.
6. Sácala del horno. Se puede colocar sobre la figura algo pesado unos segundos para que quede totalmente plana.
7. Coloca la anilla o cordón.
8. Si quieres, cubre con epoxi 2 componentes o resina para que quede brillante.
9. En caso de que desees añadir purpurina, hay que esparcirla antes de que el epoxi 2 componentes se seque.

4. Juego de ‘magia’: ¿en blanco y negro o en color?

Se trata de una actividad muy sencilla y perfecta para los más pequeños, sobre todo para aquellos a los que no les ‘apasiona’ colorear. Aquí hemos recurrido a unos guerreros de Lego, pero podéis hacer las figuras que más os gusten.

Materiales

• Impresora
• Folios
• Rotulador negro permanente de punta fina
• Lápices de colores
• Un trozo de cinta adhesiva (para hacer de tirador)
• Funda de plástico

Pasos

1. Imprime el dibujo deseado en blanco y negro.
2. Colócalo en la funda de plástico y repasa el contorno del dibujo con el rotulador de punta fina permanente. El plástico quedará pintado con la misma imagen.
3. Saca el dibujo y coloréalo.
4. Introduce de nuevo el dibujo (ya coloreado) en la funda y coloca encima un folio en blanco.
5. Pega un trozo pequeño de cinta en el folio en blanco para que haga de tirador.
6. Al retirar despacio el folio en blanco (utilizando el tirador) aparecerá como por ‘arte de magia’ la imagen coloreada.
7. Se puede colocar alrededor de la funda de plástico un marco (ver más abajo cómo hacer un marco de papel) para que quede más bonito.

5. Juego de habilidad

El arte de hacer figuras de papel mediante distintos pliegues (origami o papiroflexia) es muy beneficioso para los niños. Facilita la concentración y la atención y, al mismo tiempo, potenciamos la destreza manual.

Esta sencilla actividad de papiroflexia nos dará como resultado un divertido juego de habilidad que habrán creado ellos mismos. Reto: ¡a ver quién consigue más veces seguidas meter la bola en la taza!

Materiales

• Papel cuadrado (21 cm x 21 cm)
• Taladro
• Cordón
• Bola o cápsula

Pasos

1. Se trata de hacer un vaso de papel. Para ello, dobla el cuadro de papel por la mitad, de esquina a esquina, para conseguir un triángulo.
2. Dobla las esquinas de los laterales de igual forma que se indica en las fotos.
3. Dobla hacia abajo el pico de arriba del triángulo, a cada uno de los lados.
4. Con un taladro, haz un agujero.
5. Ata el cordón al vaso de papel.
6. En el otro extremo del cordón, añade una bola o cápsula. En la imagen se ha utilizado la cápsula de plástico de un huevo ‘Kinder sorpresa’ a la que se ha hecho un agujero.

6. Pintura abstracta

Esta actividad no defrauda. Vuestros hijos e hijas se sentirán muy orgullosos de sus obras de arte abstracto. El resultado es fabuloso. Seguro que los pequeños querrán repetir y experimentar con distintos colores y formas.

Materiales

• Hoja de papel
• Recipiente hondo que sea al menos del tamaño de la hoja de papel
• Espuma de afeitar
• Espátula
• Colorante alimentario, tinta o pintura de acuarela líquida
• Palillo o palo de brocheta
• Raspador de plástico (también se puede usar un trozo de cartulina resistente, pero que sea flexible)

Pasos

1. Cubre con espuma de afeitar el recipiente. Se puede usar una fuente para el horno, por ejemplo.
2. Extiende la espuma con una espátula para que quede una capa uniforme.
3. Deja caer unas gotas de colorante alimentario, tinta o acuarela de los colores que quieras.
4. Introduce en la espuma un palillo o una brocheta de madera y haz dibujos girándolo y moviéndolo en todas las direcciones.
5. Coloca la hoja sobre la espuma coloreada (sin aplastar).
6. Retira con cuidado la hoja, que estará cubierta de espuma.
7. Emplea el raspador de plástico para retirar la espuma.
8. Una vez retirada la espuma, tendremos un bonito cuadro abstracto como resultado.

7. Extra: Marco de papel

Las manualidades de tus pequeños son obras de arte. Trátalas así. Diles lo bien que lo han hecho, saca fotos con el móvil del fantástico trabajo realizado y exponlas en el salón, en la cocina o cuélgalas en su cuarto para que todo el mundo las pueda ver.

Este es un sencillo marco para hacer de cada dibujo o proyecto una pieza de museo. Solo necesitas una cartulina (no muy gruesa) que sea de un tamaño más grande de lo que se desea enmarcar (para un dibujo hecho en DIN A4, utiliza un tamaño 25 cm x 35 cm) y unas tijeras.

Materiales

• Cartulina fina
• Tijeras

Pasos

1. Dobla la cartulina por la mitad.
2. Vuelve a doblar por la mitad.
3. Recorta el centro dejando un borde de unos 3,5 cm; el tamaño dependerá de lo fino o grueso que se quiera el marco.
4. Recorta el borde haciendo ondas.
5. Desdobla.

Cristina
Mamá en Berlín