A los niños les encanta revivir la Historia y trasladarse a épocas remotas. Para pasar una divertida tarde de verano en el exterior, os proponemos organizar un viaje a la Edad Media para que se entretengan de un modo diferente y fuera de lo común. Con estos juegos medievales serán, por un rato, valientes caballeros que lucharán por alzarse con la victoria. ¡Empieza la justa!
1. Tiro con arco
Un tablero te servirá como base para pegar un buen número de globos de colores que los niños tendrán que explotar tirando flechas con un arco de juguete. Es un divertido modo de afinar la puntería para convertirse en diestros arqueros y, tal vez, ganar el torneo.
2. Derribar los muros del castillo
Los caballeros y princesas de los cuentos medievales se enfrentaban, muchas veces, a la magia de sus enemigos. En este caso crearemos una ficción en la cual no podrán continuar los juegos sin llegar al castillo. Un malvado brujo ha creado una torre para impedir el acceso, que en este caso será de latas. Los niños y niñas participantes tendrán que derribarla con la ayuda de una pelota. Proporcionarles bolas y un escudo para su defensa será muy fácil con una sencilla manualidad que puedes descubrir aquí.
3. Poner el fuego al dragón
Basados en el popular juego de poner la cola al burro, en esta ocasión, vamos a hacer lo mismo, pero con la figura de un dragón. Tienes que dibujar al temible animal en una cartulina, colocarlo en una pared y darles a los niños las llamas de fuego recortadas en cartulina. El juego consiste en colocarlas sobre la boca del ser mitológico, con los ojos tapado y siguiendo las indicaciones del resto de caballeros y damas de su equipo.
4. Batalla con churros de piscina
Los churros de piscina pueden ser un instrumento perfecto para los juegos medievales de este verano. En este caso, necesitarás dos churros de piscina (uno por contendiente) y un tablón elevado donde los niños deberán subirse. La batalla consistirá en pelear con las lanzas de goma hasta que uno de los dos caiga de la tabla.
5. Matar al dragón
Los mismos churros de piscina pueden servirnos para crear unas lanzas que, en este caso, podemos decorar con cintas de colores. Dale una lanza a cada uno de los niños y niñas, y coloca, en una mesa alejada de ellos, tres bolos o botellas de plástico llenas de arena. Decóralas con la figura de unos dragones recortada en cartulina para darle más realismo y emoción a la prueba. Puedes hacer que tengan la misma altura o diferentes, creando distintos tamaños. El objetivo del juego es derribar a la carrera, uno por uno, a estos seres de fuego que se han interpuesto en su camino.
6. Puntería con lanzas
Otro reto para aguerridos caballeros de la Edad Media es conseguir acertar con su lanza en el aro. Para hacer este sencillo pasatiempo, solo necesitarás unos churros de piscina, cartulina y cinta adhesiva dorada o de varios colores. Uno de ellos será la lanza, que habrá que decorar con la cinta y un cono de cartulina. Para el aro, con medio tubo será suficiente. Solo tienes que unirlo por los extremos, formando un círculo, y adornarlo con la cinta adhesiva y unos lazos. Ya solo quedará colgarlo de las ramas de un árbol y dejar que tus valerosos invitados jueguen, a la carrera, a meter la lanza por el aro.
7. Colar la pelota en el castillo
Anima a todos los participantes a poner a prueba su puntería con el juego de encestar la pelota en el castillo del dragón. Para ello, crearemos un panel con forma de fortaleza en la que haremos una ventana por la que tendrán que meter el balón. Cada participante podrá tirar un máximo de tres veces. ¡Quien más bolas enceste será el ganador!
