“Peluches CEL” es una empresa familiar valenciana cuyos artículos están hechos de materiales ecológicos y sostenibles, como el poliéster reciclado. Esto los convierte en una opción respetuosa con el medioambiente. Además, son muy tiernos y suaves, con colores vivos y formas divertidas, convirtiéndose en un regalo perfecto para cualquier ocasión, ya sea para un niño, un adulto o una mascota.
Fabricantes de peluches desde los años 60
Todo empezó hace más de 56 años de la mano de Don Virgilio Pérez y Doña Celia Machancoses, quienes montaron un pequeño negocio familiar llamado Peluches VIR. Desde el cariño, el entusiasmo y la motivación crearon, entre otros, “Los Monos Saltarines“, así como “Peposo, Peposa y Peposin”, una familia de osos que volvía loca a todos los niños.
Sobre los años 80 llegaron “Los Virkikis“, unos simpáticos peluches con la cara, manos y pies de goma, en diferentes tamaños y modelos (astronauta, profesor, motorista y aviador, entre otros). Más tarde, llegaron del país de las estrellas, y de la mano de Teresa Raval, unos osos muy divertidos y amorosos que repartían sonrisas, alegría, bailes y canciones, y teletransportaban a un mundo mágico, “Los Osos Angelosos“. En definitiva, un sinfín de tiernos y adorables peluches que, a día de hoy, siguen creando desde el cariño, y siempre con la misma finalidad: generar sonrisas y un montón de achuchones.
En la actualidad, son conocidos como “Peluches CEL“, siendo en estos momentos la tercera generación, y siguen fabricando peluches con el mimo, el entusiasmo y la motivación que les han inculcado.
El diseño y elaboración de estos peluches están pensados para transmitir amor, cariño y seguridad
