12 Deportes para aprender a perder que debería practicar tu hijo antes de los 12 años

A través del deporte los niños adquieren importantes valores como la disciplina, la constancia y la responsabilidad. Descubren la satisfacción del triunfo, pero también es necesario que sepan asumir la derrota como parte de la vida. Por eso quisimos crear esta lista de 12 deportes para aprender a perder que tu hijo debería practicar antes de los 12 años.

La fundación del tenista Novak Djokovic, en un artículo sobre la influencia de las victorias y las derrotas en el desarrollo de los menores, indica que “el sentimiento de perder y seguir adelante son habilidades que los niños necesitan desarrollar para lidiar con las experiencias negativas en la vida cuando sean mayores”.

Según esta organización, las investigaciones han demostrado que perder juegos es útil para ellos porque les enseña a mostrar empatía y afrontar la experiencia de ver ganar a otros.

Quizás al principio no les agrade darse cuenta de que no son los más rápidos ni los más fuertes. Pero justo ahí los padres debemos explicarles que la cuestión primordial no es ganar, sino disfrutar cada momento y dar lo mejor de nosotros en cada actividad.

12 Deportes para aprender a perder

Os hablaremos de actividades que todos conocemos y que requieren cierta disciplina. Todas ellas producen diversos beneficios en el aspecto físico y psicológico de los niños, además de inculcarles una serie de valores para su crecimiento personal.

1. Fútbol

El fútbol les ayuda a aprender a mantener el equilibrio y a mejorar la coordinación mientras corren con el balón en los pies. También beneficia la salud cardiovascular, aumenta los niveles de resistencia y fomenta el trabajo en equipo.

Aquí se gana y se pierde en conjunto, lo que permitirá a tu hijo desarrollar empatía y crear lazos afectivos con sus compañeros.

2. Baloncesto

Es muy popular entre los niños. También es fácil de practicar, ya que solo requiere de una pelota y un aro. Los movimientos básicos como pases rápidos y dribles mejoran la coordinación ojo-mano. Además, activa los reflejos y les hace más resistentes desde el punto de vista físico.

3. Natación

La natación genera muchos beneficios físicos y psicológicos en los menores. Es uno de los deportes para aprender a perder que fortalece todo el cuerpo y a la vez sirve para liberar estrés. Además, los nadadores se ejercitan en la competición en solitario y en equipo, y desarrollan procesos mentales que les servirán durante toda la vida.

4. Rugby

Con el rugby llegarán pronto a la conclusión de que para ganar necesitan la ayuda de otros. Sin embargo, hay que tener en cuenta que es un deporte un poco brusco, por lo que el jugador siempre debe llevar el casco y protecciones corporales. De este modo se amortiguarán los golpes y se reducirán mucho las posibilidades de sufrir hematomas y conmoción cerebral.

5. Golf

El golf resulta mucho más divertido de lo que parece en televisión y también es uno de los deportes para aprender a perder.

Si tu hijo siente una verdadera curiosidad por practicarlo, podríais visitar un campo para disfrutar juntos en un entorno de poca presión. También le ayudará a concentrarse y ser una persona independiente.

Además, es un deporte que podrá practicar durante toda la vida, incluso en la tercera edad.

6. Hockey

El hockey mejora la resistencia, la fuerza, la visión y la habilidad corporal. También ayuda a la coordinación ojo-mano-piernas, mientras controlan un disco de movimiento rápido con el palo.

Los niños descubrirán cómo recorrer la pista a toda velocidad, al mismo tiempo que los rivales se les lanzan encima. En el pasado, los padres tenían sus reservas con esta disciplina debido a las peleas que permiten las reglas. Afortunadamente, esa cultura ha ido cambiando, por lo que el hockey es seguro para los menores.

7. Atletismo

Correr es un deporte que todos los niños practican desde que aprenden a mantenerse en pie. Una vez que tu hijo comienza a caminar y tiene una comprensión completa de su equilibrio, querrá correr a toda velocidad.

Empiezan compitiendo con el perro o entre amigos, mientras disfrutan de una sensación de confianza, diversión y un subidón de adrenalina.

8. Tenis

Jugadores como Rafael Nadal, Roger Federer y Novak Djokovic le han dado al tenis un lugar destacado en el ranking deportivo como nunca. Aunque la mayoría de las veces se compite en solitario, también se juega en equipo con otro compañero.

Esta disciplina propone el respeto y la humildad como reglas básicas, además de la sana competitividad, el sacrificio, la tenacidad y la perseverancia. No solo es uno de los deportes para aprender a perder, sino que les enseña a aceptar las derrotas con dignidad.

9. Artes marciales

Es una excelente actividad para entrenar el dominio propio y el control del cuerpo y para aprender técnicas de defensa personal. Las artes marciales también enseñan importantes valores como la disciplina, el compromiso y la constancia.

El método jerárquico de los cinturones ofrece a los niños un sistema tangible para medir su progreso y crecimiento personal. Aunque con el tiempo muchos cambian esta disciplina por deportes de equipo u otras prácticas, algunos perseveran hasta obtener el cinturón negro.

10. Béisbol

Su práctica favorece la coordinación ojo-mano, la disciplina, la constancia y el trabajo en equipo, entre otras cosas. La mayoría del tiempo, el jugador de beisbol mantiene una postura pasiva y una actitud de espera. Eso ayuda a desarrollar la paciencia, una valiosa virtud que les ayudará a sobrellevar los momentos en los que deban aguardar acontecimientos o respuestas a lo largo de la vida.

Puedes inscribir a tu hijo en una escuela de béisbol a una edad temprana, entre los 6 y 7 años, cuando comienzan a desarrollar sus habilidades motoras para las actividades físicas de competencia.

11. Tenis de mesa

Es muy divertido y estimula la concentración, la estrategia táctica y la coordinación mano-ojo. Eso lo convierte en el juego perfecto para que agudicen sus reflejos y, en las personas mayores, para que perfeccionen su técnica.

Al ser un deporte acelerado de corta distancia, ayuda a mejorar los reflejos, desarrolla la habilidad de manos y pies, y tiene un impacto leve en las articulaciones.

12. Ciclismo

El ciclismo ayuda a aliviar el estrés, la depresión y la ansiedad. Al enfocarse en el trayecto, el niño estará desarrollando la concentración y la conciencia del momento presente.

En el aspecto físico, los pedalistas trabajan las piernas y los músculos centrales del cuerpo, incluida la espalda y los abdominales. Potencia la resistencia física, la coordinación y el equilibrio. Además, les enseñará a esforzarse para alcanzar una meta.