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Alimentación en familia

Cómo hacer una cena de Navidad sostenible y acumular menos basura

Una Navidad sostenible
Sapos y Princesas
Sapos y Princesas
Fecha de actualización: 03.12.18

Llegan las fiestas y, con ellas, la alegría, las cenas y los regalos. La otra cara de la moneda es que las navidades traen derroche de comida y luz. Cambiar esto está en nuestras manos: una Navidad sostenible es posible. Por ello, os vamos a dar varios consejos para reducir la cantidad de alimentos, papel o plástico que tiramos durante estos días, así como para dar los primeros hacia el cuidado de nuestro planeta.

Tenemos un modelo de Navidad insostenible

Para la asociación Ecologistas en acción, este consumismo sin sentido promueve un modelo insostenible, ambiental y socialmente. Ambientalmente, porque si el modelo de consumo de los países del norte se extendiera por todo el mundo, serían necesarios tres planetas (con sus materias primas y fuentes energéticas) para atender la demanda. Y socialmente porque solo un 12 % de la gente que vive en Norteamérica y Europa occidental es responsable del 60 % de ese consumo, mientras que los que viven en el sudeste asiático o en el África subsahariana representan solo un 3,2 %.

Comprar, derrochar comida y utilizar papel y plástico de la forma en que se hace en Navidad durante más de 15 días en todo el mundo es muy perjudicial para el planeta. Debemos reflexionar a la hora de adquirir cualquier producto sobre si realmente lo necesitamos y averiguar si está fabricado de manera sostenible o si en su proceso de fabricación se ha perjudicado al medio ambiente.

Navidad sostenible

Consejos para una Navidad sostenible

Durante estos días festivos, se tira gran cantidad de comida, papel y plástico y se produce más gasto energético. Por ello, las navidades pueden tomarse como una buena oportunidad para empezar a ser un poco más ecológicos. Os vamos a dar algunos sencillos consejos para que disfrutéis de una Navidad sostenible.

1. Procura gastar en proporción al número de comensales

Uno de los grandes errores es comprar para más personas de las que van a venir a comer o cenar. Hay que calcular la cantidad de alimentos a consumir según el número de invitados para evitar que sobre comida que luego acabará en la basura. Aunque esta sea una época de excesos, debemos comprar con cabeza e intentar hacer nuestra Navidad sostenible.

2. No decir a cada uno que traiga un plato

Un problema habitual es que cada invitado suele traer un aperitivo o un postre y al final se triplica o se duplica la comida. Si sabemos que nuestros comensales van a venir con algún plato, es mejor reducir nuestro menú. También podemos convencer a los comensales de que traigan, por el contrario, vino, champán o café.

3. Aprovechar los ingredientes

Si para el quiche de calabacín y jamón, por ejemplo, necesitas media cebolla, podemos elegir otro plato más que lleve cebolla y así aprovechar la cebolla entera. Se trata de buscar recetas que se complementen para evitar que los alimentos se desperdicien.

4. Utilizar bolsas reutilizables en la compra

Otra de las formas de contribuir a crear un mundo mejor es llevar siempre encima bolsas reutilizables. Hay que evitar utilizar productos y embalajes de plástico porque se nos acumularán en casa.

5. Crear compost con las sobras

También podemos, en vez de tirar algunos desperdicios, producir compost con las sobras de las frutas, los vegetales o las cáscaras de huevo o nueces. Podemos destinar un recipiente a este fin que nos resultará muy útil para mantener nuestras plantas de modo natural.

6. Cuidado con el papel

Una buena idea es volver a las servilletas de tela. No solo nos quedará la mesa más elegante, sino que evitaremos el desperdicio de papel. También es recomendable usar la vajilla y los cubiertos de toda la vida, en vez de las desechables. Supondrá quizás más trabajo en la cocina, pero evitaremos esas toneladas de desechos en nuestras basuras. Asimismo, debemos evitar el exceso de regalos para los niños y la cantidad de envoltorios que se van de su mano.

7. Un centro de mesa natural

Otra buena idea es hacer nosotros mismos el centro de mesa con piñas, calabazas enanas, eucalipto u hojas secas. Podemos añadir alguna vela de colores. Evitaremos cualquier elemento de decorativo de plástico o de papel en nuestra decoración navideña.

8. Las luces, con cabeza

En Navidad, también nos solemos olvidar del ahorro energético y, de hecho, esta es una de las épocas del año en que más luz y calefacción gastamos. Tenemos que intentar poner bombillas de bajo consumo y desconectar las luces del árbol o de la decoración en cuanto no las estemos disfrutando, e incluso mantener la temperatura de la casa como todos los días. También hay que reducir al máximo la utilización del coche y usar el transporte público. Otra buena idea es reducir el uso de aparatos eléctricos que necesiten pilas y buscar solo los más eficientes y necesarios.

9. Aprovecha las sobras

Por último, os recomendamos que aprovechéis las sobras para comer los días siguientes, como con recetas de sopa, croquetas, ensaladas con pavo o pasteles de carne. Incluso puedes dar sobras a los invitados en un táper para no tener que tirarlas o donar a algún comedor social.