Puebla de Sanabria es una de las localidades más antiguas de Zamora, declarada Conjunto Histórico Artístico. Antiguamente, era estación de paso entre Castilla y Galicia, pero con la llegada de la autovía, el número de visitantes disminuyó considerablemente.

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Puebla de Sanabria

Es la capital de la Comarca de Sanabria, una tierra con bastantes atractivos naturales. Unamuno quedó prendado de este lugar, por lo que se inspiró en él para escribir San Manuel Bueno, mártir.

Ahora, muchos viajeros acuden a Puebla de Sanabria atraídos por su historia y su casco histórico tan bien conservado. La naturaleza le ha dotado de características defensivas que, unido a su situación cercana a Portugal, Hicieron de este pueblo un lugar seguro y defendido.

Puebla de Sanabria, en Zamora
Puebla de Sanabria | Fuente: Facebook de Castilla y León es vida

Qué ver

En el centro de este pueblo zamorano encontraréis empinadas calles, rodeadas por una muralla construida en los siglos XII y XIII.

Iglesia de Nuestra Señora del Azogue

En la Plaza Mayor, cerca del Castillo, se encuentra esta iglesia parroquial. La Virgen del Azogue es la patrona de Puebla y otorga este curioso nombre al templo. Sus orígenes se remontan a un término árabe cuyo significado era mercado, indicando el uso mercantil que tuvo la Plaza Mayor.

Su construcción data de finales del siglo XII, de esta época conserva sus restos románicos en los muros laterales de la nave y en el hastial con su portada.

La Torre del Campanario resalta altiva, aunque poco concordante con la sobriedad románica de la edificación primitiva. Alberga un gran reloj que marca impasivo el paso del tiempo por los cuatro costados y avisa con sus campanadas las horas y las medias.

Iglesia de Nuestra Señora del Azogue
Iglesia de Nuestra Señora del Azogue | Fuente: Flickr José Antonio Gil Martínez

Ermita de San Cayetano

Es una pequeña ermita situada junto al castillo, y la Plaza Mayor, y adosada a la Iglesia de Nuestra Señora del Azogue. De estilo neoclásico, fue construida en el siglo XVIII por la familia Ossorio.

El exterior tiene diferentes ornamentos como escudo, pilastras, rosetón… Posee una fachada bellamente ornamentada que contrasta con el entorno. El interior consta de una sola nave con bóveda de cañón y cúpula sobre el altar mayor totalmente de piedra.

Ermita de San Cayetano
Ermita de San Cayetano | Fuente: Canva PatriciaEnciso

Castillo de los Condes de Benavente

Se encuentra en un amplio llano, en la cumbre de la precipitada mole de roca por donde discurre la Villa. A 960 m. de altitud, es innegable que el lugar y el emplazamiento hacían de dicha fortaleza algo maravilloso.

Fue edificado en la segunda mitad del siglo XV, bajo el mandato del IV Conde de Benavente, D. Rodrigo Alonso Pimentel, cuyos blasones y los de su esposa aparecen en la puerta principal del castillo.

Es de planta regular y en el centro posee una enorme y casi cuadrada Torre del Homenaje, conocida popularmente como “El Macho”, constituida por varias plantas, protegida por un puente voladizo, merece la pena disfrutar del paisaje que se divisa desde lo alto de la misma.

En esta encontramos el Centro de Interpretación de las Fortificaciones. Donde podéis conocer la historia del castillo, de la villa y de otras fortalezas de Zamora, a través de paneles, audiovisuales y juegos interactivos, que seguro captan la atención de vuestros hijos.

Puebla de Sanabria
Puebla de Sanabria | Fuente: Canva Victor Lafuente Alonso

Las murallas

Puebla de Sanabria conserva buena parte de las murallas medievales de los siglos XII y XIII que lo protegían. Hay zonas que se pueden recorrer y disfrutar de las vistas desde allí. También se conservan algunas garitas desde las que se hacía vigilancia.

La muralla fue construida a la vez que el Castillo y sus muros tenían una anchura de metro y medio. Contaba con varias torres para su defensa, aunque ya no queda ninguna. Igual que tampoco quedan restos de las 2 puertas con las que contaba el recinto.

Muralla de Sanabria
Muralla de Sanabria | Fuente: Flickr luispabon

Seguro que a los niños les encantará conocer el Museo de Gigantes y Cabezudos, uno de los pocos museos dedicados a esta tradicional fiesta.

Y por supuesto, no os podéis marchar de la zona sin conocer las espectaculares playas del Lago de Sanabria, en las que en verano os podréis dar un refrescante baño y en invierno podréis admirar su magnífico paisaje.

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