La Casa de las Columnas en la provincia de Soria, forma parte del yacimiento arqueológico de Numancia. Este yacimiento, símbolo de la resistencia y valentía de un pueblo frente a la poderosa Roma, está situado a 7 km. de Soria capital, en lo alto del Cerro de la Muela.
Aunque puede visitarse por libre, siguiendo los paneles que encontrarás durante el recorrido, te recomendamos realizar una visita guiada porque si no, te dejarás por el camino muchos aspectos, anécdotas y curiosidades de la historia de Numancia.
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Antecedentes
Numancia fue una población celtíbera situada a tan solo siete kilómetros de la capital de Soria. El siglo concreto de su origen no es conocido aunque se tienen evidencias que datan del siglo XIV a.C. en la Edad de Bronce. Hasta el siglo XIX no se localizó con certeza la ubicación de esta ciudad mítica, que fue conquistada por los romanos en el 133 a.C. A principios del siglo XX se iniciaron campañas arqueológicas en el área.
Pero más allá del origen, lo más importante del yacimiento de Numancia y lo que lo sitúa como un lugar muy importante dentro de la historia, es la resistencia que opusieron frente a la invasión y conquista, incluso viajando a Roma para negociar los terrenos y el poder con el senado romano.
Además, el poblado de Numancia es sin duda el yacimiento arqueológico que mayor información sobre el mundo celtíbero ha aportado, destacando también la abundante y más rica colección de cerámicas pintadas que se descubrieron en este lugar ofreciendo un valor estético y artístico añadido.
La Casa de las Columnas
Las típicas viviendas de Numancia y del período celtíbero estaban construidas en una base de piedra con columnas y techos de madera. Después se recubría la estructura con adobe en las paredes y de paja en los techos.
La casa que se puede visitar en Numancia es la llamada Casa de las Columnas. Está distribuida en 3 zonas diferentes: la de las labores artesanales, una habitación de reunión familiar donde hacían vida y una despensa para guardar todo tipo de alimentos.
Esta casa constituye un buen ejemplo de las residencias del barrio sur. Se incorporan elementos arquitectónicos al gusto romano, aunque solamente se pueden apreciar los restos del patio porticado. Era un espacio de forma rectangular, situado delante de las casas, con un pequeño pórtico, en forma de L.
Se apoyaba en columnas, de las cuales, solo quedan 2, para protegerse del sol, y una zona descubierta, o patio, de forma rectangular, para aprovechar el sol. Desde este patio se pasaba a una zona más elevada, la vivienda. Situada detrás, se accedía a ella por las escaleras de piedra situadas al fondo.
El tejado de estas casas era de tipo romano, realizado con grandes tejas planas rectangulares (tegulae), cuya unión se cubría por otra teja curva (imbrex).
Numancia
Su mítica historia la ha convertido en uno de los parques arqueológicos más visitados de Castilla. Enclavada en el valle del Duero, la vieja ciudad es uno de los hitos más importantes de la llamada Celtiberia. Las sucesivas campañas arqueológicas de las que fue objeto la ciudad heroica pusieron al descubierto una realidad más antigua, de época celtíbera, y sobre ella otra bajo los dominios de Roma.
El asentamiento de Numancia no terminó tras la ciudad romana, sino que parece haber continuado habitado por visigodos hasta el siglo VI d.C., momento en que definitivamente parece abandonarse la ciudad.
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