El Parque Torres, o más conocido por los vecinos como Castillo de los Patos, es el espacio verde más visitado cuando se hace turismo por la ciudad de Cartagena. Enclavado en lo alto de una de las colinas que rodean la localidad este espacio verde dispone de unas impresionantes vistas del entorno.

El Parque Torres antiguamente tenía un estanque con patos (de ahí el nombre de Castillo de los Patos) hoy en día sigue contando con el estanque pero los patos ya han desaparecido, en su lugar el visitante podrá encontrarse con numerosos pavos reales.

Subir hasta lo alto de este precioso jardín puede hacerse de dos formas diferentes, una es usando el ascensor turístico, que permite llegar hasta la zona más alta sin cansarse o bien dando un divertido paseo admirando cada una de las plantas, flores y rincones que adornan este espacio y disfrutando de las vistas. Esta segunda opción es algo más cansada, la subida se hace dura en algunos momentos pero merece sin duda la pena. El ascenso se realizan mediante escaleras por lo que no es recomendable para carritos de bebés ni sillas de ruedas. Si se quiere subir a pie y se va con niños muy pequeños la mejor opción es la mochila de porteo.

El Castillo que se alza sobre la colina, dentro del Jardín Torres, actualmente es el Centro de Interpretación de Historia de Cartagena, una de las ciudades más importantes de Roma.

Desde la parte más alta del parque se pueden admirar las magníficas vistas de la ciudad, el puerto, las colinas que rodean la urbe, los barrios que han ido surgiendo ladera abajo… uno de los mejores momentos para subir a este precioso jardín es durante la puesta de sol ya que desde allí se obtiene uno de los más bonitos atardeceres de Cartagena.