La Vía Verde del Río Guadarrama, parte del Parque Natural El Soto, en Móstoles, y llega hasta la Plaza de Segovia de Navalcarnero.
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Historia de las Vías Verdes
En 1993, existían en España miles de kilómetros de líneas de tren en desuso y desde aquel año, esos abandonados trazados ferroviarios empezaron a acondicionarse para reconvertirlos en itinerarios cicloturistas y senderistas dentro del Programa Vías Verdes, coordinado por la Fundación de los Ferrocarriles Españoles.
Este programa tiene como objetivo promover el deporte al aire libre, la movilidad no motorizada y fomentar el uso de la bicicleta. En la Comunidad hay un total de cuatro Vías Verdes, que suman aproximadamente 90 kilómetros. La Vía Verde del Guadarrama tiene una distancia de unos 14,4 kilómetros, un desnivel de alrededor de 125 metros y se completa en aproximadamente 1 horas y 30 minutos.
Itinerario de la Vía Verde del Río Guadarrama
La Vía Verde del Guadarrama es una ruta lineal que podrán hacer personas sin experiencia, e incluso niños. El itinerario no está señalizado, y transcurre íntegramente por tierra sin acondicionar. Parte del Parque Natural El Soto, en Móstoles, pasa por el Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama, atraviesa bosques mediterráneos, dehesas de encinas, tierras de cultivo, riberas fluviales y llega, finalmente, a la Plaza de Segovia de Navalcarnero, localidad con un notable interés cultural.
El recorrido da comienzo en la entrada del Parque Natural El Soto de Móstoles, al que hay que acceder para atravesarlo por su camino principal. Inaugurado en 1987, el parque tiene una superficie total de 70 hectáreas. Su elemento paisajístico más destacado es el lago artificial de 26.216 m². Está rodeado de una exuberante vegetación compuesta por numerosas especies arbóreas y en él es posible ver diversas aves acuáticas. Además, el Parque cuenta con aparcamiento, servicios públicos, un kiosco-bar, merenderos, zona de juegos infantiles, un vivero municipal, una senda botánica, un campo de fútbol, un anfiteatro y la Casa de Oficios, donde se desarrollan actividades medioambientales.
Una vez fuera del parque, la ruta comienza a transcurrir por distintas vías asfaltadas, pistas de tierra y caminos de balasto. Así se llega hasta el Puente de Hierro, que hay que cruzar. El Puente de Hierro de Móstoles fue levantado para que la antigua línea de tren que unía Madrid con Almorox (Toledo) salvara el cauce del Guadarrama. Más adelante, es posible ver a mano izquierda la antigua estación Río Guadarrama, otro de los vestigios que recuerdan la existencia del trazado ferroviario.
El itinerario continúa cruzando amplios campos de cultivo de vides. El paraje con mayor valor ecológico y paisajístico por el que atraviesa Vía Verde del Río Guadarrama es el Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama, un espacio natural protegido que ocupa una superficie total de 22.226 hectáreas, repartidas en 19 términos municipales. El eje central del parque es el curso medio del Guadarrama y, a la altura de los Móstoles y Navalcarnero, conserva buenos sotos de sauces y fresnos comunes. En las zonas más alejadas del río, existen bosques mediterráneos de encina.
Tras recorrer 12,065 km, se entra en el municipio de Navalcarnero por el Barrio de la Estación. Hay que pasar varias rotondas y llegar al carril-bici, por el que se circula durante aproximadamente 200 metros, hasta aparecer junto a la Plaza de Toros Félix Colomo. Nada más pasar el ruedo se abandona el carril-bici y se llega a los últimos metros de la ruta.
Finalmente, se coge la calle de la Constitución que desemboca en la Plaza de Segovia, centro neurálgico de Navalcarnero y punto final del itinerario. Desde ella se ve la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, declarada junto a la plaza en la que se encuentra, Bien de Interés Cultural en la categoría de Conjunto Histórico.
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