Los Mallos de Riglos son formaciones geológicas características de las sierras del Prepirineo. Sus paredes verticales, que parecen estar exentas de cualquier conjunto montañoso, hacen que sean ideales para la práctica deportiva de la escalada.

En la localidad oscense de Riglos podemos encontrar estos mallos, muy frecuentados por profesionales escaladores y por familias que acuden cada año a disfrutar de las espectaculares vistas que ofrece este singular paisaje.

Si te apetece conocer la historia y gastronomía de Huesca y descansar unos días en familia, reserva ya aquí.

Los Mallos de Riglos

En 2016 fueron declarados Monumento Natural por su gran elevado interés natural y paisajístico. Estos elevados montículos montañosos fueron levantados por la orogenia alpina y posteriormente erosionados por el agua, que los ha ido aislando y modelando. Hoy en día sus espectaculares paredes rocosas verticales pueden verse en La Hoya de Huesca.

Mallos de Riglos
Mallos de Riglos | Fuente: Canva

Cada mallo recibe un nombre, de tal forma que podemos encontrarnos Mallo Puro, Mallo Pisón, Mallo Visera y Mallo Firé. A lo largo de los 300 metros de altura que pueden llegar a alcanzar los mallos, sobrevuelan y habitan numerosas especies de aves, entre ellas la más destaca es el buitre leonado.

Al atardecer debido a los materiales ferruginosos de la roca, los mallos se tiñen de un color rojizo precioso. Para estas ocasiones es imprescindible una cámara de fotos y aprovechar para hacernos una foto en familia que quedará para el recuerdo.

Ruta Circular por los Mallos de Riglos

Visitar esta increíble formación geológica es posible gracias a una ruta especialmente dedicada a familias con niños. Este camino rodea los Mallos de Riglos de tal manera que el punto de partida y el de llegada es el mismo, siendo el casco urbano del pueblo.

Se trata de una ruta circular muy fácil de hacer con niños, aunque hay que ir bien preparado para recorrer los 5,5 kilómetros que presenta. Se tarda un total de 2 horas y 20 minutos en dar la vuelta a los mallos, por lo que en la mochila no puede faltar agua y algún tentempié para el camino.

Centro de Interpretación de aves carroñeras ARCAZ
Centro de Interpretación de aves carroñeras ARCAZ | Fuente: Turismo de Aragón

Itinerario

Esta propuesta de ruta de senderismo parte de Riglos, donde será conveniente aparcar el coche en el aparcamiento habilitado en el centro del pueblo. Cerca de aquí se encuentra la oficina de Turismo, donde poder informarnos de la dirección que deberemos tomar para dirigirnos al comienzo de la senda.

A menos de 1 km nos encontraremos con el primer poste informativo que indica el inicio de la ruta a los Mallos de Riglos. A la derecha se ubica el Centro de Interpretación de Arcaz, dedicado especialmente al buitre leonado. Merece mucho la pena visitar este centro antes o después de la ruta, ya que aquí los niños se quedarán asombrados con las grabaciones de la actividad de estos animales que se proyectan en el centro gracias a una red de cámaras instaladas en algunas de las buitreras de los mallos.

Rafting
Rafting en el río Gallego | Fuente: Turismo de Aragón

Tras esta pequeña parada ascenderemos en altura por los mallos orientales mientras disfrutamos de unas magníficas vistas del conjunto de los mallos. Una vez arriba, nos quedaremos sin respiración con el paisaje que veremos desde el mirador de la Espinalba. Cuando queramos podemos volver de nuevo por el camino principal y comenzar el descenso hasta llegar de nuevo al pueblo de Riglos.

Otras actividades para hacer con niños

Muy cerca de los Mallos de Riglos se encuentra el río Gallego, en el cual podemos practicar actividades deportivas acuáticas en familia, como el rafting.

Si te apetece conocer la historia y gastronomía de Huesca y descansar unos días en familia, reserva ya aquí.