Soportújar es una localidad y municipio español situado en la parte noroeste de la comarca de la Alpujarra Granadina, en Andalucía. La mayor parte del municipio está integrado en el Parque Nacional de Sierra Nevada.
¿De dónde viene el nombre de Soportújar?
Hasta el siglo XVI, esta población era conocida por el nombre de “Xabotaya” o “Soborcoxar”, cuyo origen es desconocido. La etimología popularmente aceptada de Soportújar, como muchos habréis adivinado ya, es «lugar de soportales», del término latino soportal, por lo que existe la creencia de que el municipio ya estaba poblado en tiempos de los romanos.
¿Por qué se les llama “brujos” a los soportujanos?
Todo viene del origen gallego de sus ancestros, tras las repoblaciones acaecidas con la expulsión de los moriscos tras la Rebelión de las Alpujarras. Se dice que a esta aldea llegaron colonos del norte, que trajeron costumbres y leyendas paganas: hablaban de meigas, aquelarres y ritos, despertando el recelo de sus vecinos. Si bien el origen no ha sido confirmado por las fuentes históricas, lo que sí se sabe seguro es que hubo varias denuncias de brujería que llevó a las autoridades eclesiásticas a investigar a varias mujeres sospechosas de herejía.
Qué ver en Soportújar
Cueva del ojo
La Cueva del Ojo de la Bruja se encuentra a menos de un kilómetro del pueblo. Esta cueva da nombre al barranco adyacente, aunque se dice que, en realidad, recibe este nombre por el ojo de la Gran Bruja que todo lo ve. Estuvo habitada por familias pobres durante el siglo pasado, y es un lugar venerado tanto por los soportujanos como por los visitantes.
Según la tradición transmitida de generación en generación, esta cueva fue testigo de supuestas prácticas de brujería, motivo por el cual existen muchas leyendas asociadas a las ánimas y duendes que moran por ella. La más popular decía que la grieta del fondo de la cueva comunicaba con otros mundos. Se creía que por ella entraban y salían las ánimas, y era un pasadizo hacia el purgatorio para aquellas almas que todavía debían “pagar” su penitencia.
Cabeza gigante de Baba Yaga
Nada más cruzar el acceso a Soportújar, os ofrece la bienvenida la primera de las brujas que vive en la localidad. Se trata de Baba Yaga, una anciana sobrenatural de ojos azules que habitaba en los bosques rusos y que engañaba a sus víctimas para comérselas. Parece ser que decidió cambiar de aires y desplazarse al sur, aunque eso sí, siempre a los pies de Sierra Nevada, para tener la nieve a solo un paso.
Pozo de los deseos
Otro enclave que visitar en este pueblo es su Pozo de los Deseos. Eso sí, piénsatelo dos veces antes de asomarte, ¡porque hay una criatura que te vigila desde sus profundidades!
Fiestas patronales
Las fiestas de este municipio se celebran en enero, dedicadas a San Antón, y en agosto a San Roque. En las fiestas de San Antón se enciende un chisco, (una gran hoguera con leña), junto al que se celebra una parrillada. Durante estas fiestas se celebra el entierro de la zorra, que consiste en construir un muñeco que imita a este animal, pasearlo por las calles, donde recibe los ‘responsos’ de los vecinos, y quemarlo por último con petardos y cohetes.
La fiesta más promovida por el ayuntamiento es la llamada Feria del Embrujo, que se celebra desde 2009 cada agosto durante una semana. Esta fiesta pone de manifiesto la tradición de brujos y brujas de Soportújar, que no es tal, sino exclusivamente basada en el mote tradicional de los habitantes. Durante la Feria del Embrujo hay actuaciones musicales, pasacalles y actividades infantiles.
La fiesta mayor del pueblo es en honor a San Roque y se celebra en agosto. El Domingo de Resurrección se caracteriza un muñeco como judas, se cuelga en algún lugar del pueblo y se quema como figuración de la quema del mal.
Gastronomía
En Soportújar, como en sus alrededores, son importantes los platos de cocina mediterránea, como los cocidos, el puchero de hinojos o el plato alpujarreño, elaborado con patatas, huevo frito, jamón serrano, morcilla, chorizo, pimiento verde y cebolla.
Las migas, de pan o de sémola, se toman con pescado, melón, pimientos asados, pisto, ensalada, sandía, etc. Son también típicas la fritada de verduras y las gachas pimentonas, entre otros muchos platos. Entre los postres, destacan los roscos y los pestiños. En la sierra de Soportújar también se producen castañas, manzanas y peras, judías y hortalizas.
