La Ruta de la Lana es una excusión muy conocida, sobre todo por los peregrinos que pasan por Cuenca en el camino de Santiago de Compostela. Este era un camino muy transitado por el cual se llevaba la lana de la Alcarria y los paños de Cuenca en dirección a las ferias de Medina y Burgos. De este modo, se trata de una ruta que está ligada a uno de los trayectos comerciales más antiguos de España y que, actualmente, es un gran atractivo turístico.
Ruta de la Lana de Cuenca
La Ruta de la lana es el camino por el que los peregrinos a Santiago de Compostela viajaban desde Levante a través de Castilla-La Mancha. En la zona que pasa por cuenca podrás realizar un interesante recorrido cultural en el cual conocerás los lugares emblemáticos de la provincia.
La excursión se inicia en Campillo de Altobuey, que es una de las puertas de la comarca de La Manchuela. Allí podrás visitar la fantástica plaza Mayor y el hospital del Santo Cristo de Burgos. El paseo por estos rincones te hará vivir la época dorada de la Ruta de la lana. Asimismo, te podrás acercar al Convento de Nuestra Señora de la Loma, en el que recorrerás una iglesia, una huerta y las celdas conventuales. Este es un recinto muy curioso, ya que dentro del complejo se encuentra también una plaza de toros. Del mismo modo podrás conocer las cuatro ermitas que rodean el poblado, sobre todo vale la pena la de Santísima Trinidad, que data del siglo XVI.
La ruta continúa por Motilla del Palancar, donde podrás dar un paseo por el Riato en medio de un ambiente muy del siglo XVII. Allí transitarás por la vía principal que llega hasta el río. Y también podrás ver las portadas renacentistas y bóveda de lacería de la iglesia de San Gil. Otro de los sitios emblemáticos de la ciudad es la Casa de los Luján, un palacio del siglo XVII que tiene unas rejas impresionantes.
Siguiendo la ruta
La Ruta de la lana sigue por Almodóvar del Pinar, el pueblo de las carretas. Este es un pequeño pueblo por el que han pasado muchas culturas. Allí podrás ver cómo las calles mantienen el trazado cuadricular romano que dio origen al pueblo. En la plaza Mayor te encontrarás con dos torres cilíndricas y restos de una fortaleza árabe.
Un poco más adelante se sitúa Monteagudo de las Salinas, donde podrás visitar unas salinas que datan del siglo XII. Se trata de un ejemplo espectacular de arqueología industrial, ya que hasta el siglo XX producían alrededor de doscientos mil kilos de sal al año. Del mismo modo, es interesante el castillo de Monteagudo, una fortaleza medieval y renacentista desde donde, además, disfrutarás de unas vistas impresionantes de la serranía de Cuenca.
Y, finalmente, el camino de la lana te llevará hasta Carboneras de Guadazaón, donde verás la iglesia de Santo Domingo de Silos que se construyó sobre lo que era el antiguo Castillo de Aliaga. Debido a esto, al exterior te encontrarás con partes de los muros de la antigua fortaleza.
