El Parque Natural del Prat está situado entre la Ribera de Cabanes y Torreblanca, que se separa del mar Mediterráneo a través de un cordón de gravas, arenas y cantos rodados.
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Parque Natural del Prat
Hace miles de años, esta zona era una albufera que se había formado por la creación de una restinga que no permitía el desagüe de las aguas del mar y que se debía a una agrupación de materiales arrastrados por el río Cuevas.
Esta albufera se fue llenando de depósitos cuaternarios que formaron turba a causa de la carbonificación de los restos vegetales. Esto creó el pantano del Prat y el marjal, que se encuentra a día de hoy en un tamaño mucho más reducido en comparación con su extensión original.
Posteriormente, ya en el siglo XVIII, se comenzaron a tratar las tierras para crear zonas de cultivo, pero no fue hasta los años finales del siglo XIX cuando se inicia el cultivo de arroz, que luego se abandonó en la década de los 60 del siglo XX.
Una parte de estos terrenos quedó totalmente inutilizada, por lo que volvió a ser colonizada otra vez por la vegetación natural. La otra, en cambio, se dedicó a la ganadería y el cultivo de frutas, verduras y hortalizas.
El Parque Natural del Prat cuenta con la turbera más amplia de todas las lagunas costeras de la Comunidad Valenciana. Además, se ha generado un sistema lagunar de manera artificial que cuenta con la profundidad de entre cuatro y seis metros.
Este sistema se encuentra en expansión constante debido a la actividad minera, que va ocupando terrenos nuevos hacia el sur.
Flora y fauna
En el Parque Natural del Prat conviven varias comunidades vegetales que se agrupan en tres poblaciones principales que son las formaciones acuáticas, las semiacuáticas y las comunidades de saladar y del cordón litoral.
En el espacio acuático, encontraréis varias especies importantes como el fartet, endemismo ibero-magrebí en regresión. Destaca la presencia del samaruc, que es un endemismo ibérico en grave peligro de extinción.
Esta vegetación comparte el Parque Natural del Prat con otro conjunto de especies amenazadas, como la del galápago europeo, cuyas poblaciones están desapareciendo a causa de la contaminación del agua. En cambio, gracias a la buena calidad del agua de este parque, aquí se sigue conservando una población muy importante.
Las aves son el tipo de fauna que cuenta con más protagonismo. Aquí se encuentra la mayor colonia nidificante de canastera de todo el litoral mediterráneo de nuestro país.
También destaca la presencia del carricerín real, el aguilucho cenizo, el aguilucho lagunero, el zampullín, el avetorillo, el ánade real y la gallineta común, entre otros grupos de aves.
Durante la temporada de invierno, encontraréis muchas anátidas en las lagunas y las zonas inundadas, como es el ejemplo de las garcetas comunes, los patos colorados y los porrones europeos. También se pueden contemplar de forma regular los somormujos lavancos y las agachadizas comunes.
El Parque Natural del Prat también cuenta con un papel muy importante como zona de descanso y de alimentación de los pasos migratorios de muchas especies, por lo que este espacio está considerado como un auténtico oasis ornitológico.
Por todo ello, la importancia de su fauna y flora está reconocida a nivel mundial, habiéndose incluido en la Lista de Humedales de Importancia Internacional y en el Catálogo de Zonas Húmedas de la Comunidad Valenciana.
También ha sido declarado Zona de Especial Protección para las Aves, Lugar de Interés Comunitario de la Comunidad Valenciana y cuenta con el reconocimiento de Parque Natural desde el año 1988.
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